La aprobación de la
Ley de Exportación de Servicios y Turismo, por parte de la Comisión Permanente
del Congreso de la República, es un paso importante para que el
Perú tenga un marco legal que promueva esa actividad y genere una mayor
cantidad de empleos, señaló el presidente de la Asociación de Exportadores
(ADEX), Juan Varilias Velásquez. La exportación de
servicios en los tres primeros meses del 2017 sumó US$ 1, 869 millones, 23% más
respecto al mismo periodo del año pasado, tasa superior a la lograda por otros
sectores, sin embargo, otros países tienen un mejor enfoque tributario que les
permitió obtener resultados alentadores, por ejemplo, México exporta servicios
23 veces más que el Perú y Chile 10 veces más.
Cifras
Este sector es un
gran generador de puestos de trabajo, se estima que en el primer trimestre
promovió la creación de 458 mil 395 puestos, mientras que el año pasado superó
el millón 863 mil, 6% más respecto al 2015. “El tener un marco legal promotor
ayudará a mejorar esas cifras”, enfatizó Varilias.
Recordó que un
reciente estudio de la Asociación Latinoamericana de Integración (ALADI) señala
que Perú tiene una clara ventaja comparativa en los servicios relacionados con
el turismo, pero que esa ventaja no se puede aprovechar si no hacemos como
Colombia, en donde los hoteles piden el pasaporte para liberar al turista del
Impuesto al Valor Agregado (IVA).
Esta propuesta de
Ley, que los exportadores esperan desde hace años, recoge observaciones del
Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) y señala ahora que la exportación de
servicios ya no será gravada con el Impuesto General a las Ventas (IGV) y
precisa los requisitos que debe cumplir para ser considerada como una
exportación. Además le otorga el derecho a la devolución del IGV por sus
compras intermedias.
“Este tratamiento
tributario no representa ningún trato preferencial o diferenciado para el
sector servicios, solo se está aplicando un principio que está vigente en la
exportación de bienes y se usa en todo el mundo”, manifestó el titular del
gremio de los exportadores.
Explicó que en
términos prácticos, un producto o servicio exportado no debe pagar IGV porque
el comprador es de otro país y está sujeto a sus propias leyes tributarias. Por
tanto, bajo las condiciones actuales, muchos servicios exportados por el Perú
pagan IGV y se encarecen respecto a los servicios de otros países.
A su turno, el
presidente del Comité de Servicios al Comercio Exterior de ADEX, Carlos Penny,
indicó que se trata de un paso importante para darle un empuje a la balanza
comercial, generando mayor innovación y más puestos de trabajo.
“Un claro ejemplo son los
call center, estos centros de comunicación pueden atender clientes en todo el
mundo y los peruanos tienen la capacidad de brindar un mejor servicio que los
que otorgan en países como México, Colombia, España o cualquier otro de
Centroamérica”, señaló.
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