El resultado de la cuenta corriente de la balanza de pagos alcanzó
un superávit de 0,6 por ciento del PBI en 2023. Con este resultado es el segundo año, en los últimos dieciséis, que
se registra un superávit, después del año 2020 que estuvo marcado por la
pandemia del COVID-19. La cuenta corriente de la balanza de pagos registra las
transacciones del Perú con el mundo en cuatro ámbitos: bienes (exportaciones e importaciones),
servicios, ingreso primario (renta de factores) e ingreso secundario
(transferencias como remesas y donaciones).
En este superávit influyó, en primer lugar, la reversión de los
altos precios de los insumos importados (petróleo y otros industriales), por un
mercado mejor abastecido, lo que, aunado a una reducción del volumen importado,
bajó el valor de importaciones y aumentó el saldo de la balanza comercial.
En segundo lugar, está el menor déficit de servicios, debido
a que los costos de los fletes marítimos revirtieron parcialmente, después del
encarecimiento registrado en la crisis de contenedores de 2022; así como por la
normalización del escenario sanitario que permitió la afluencia de más turistas
al país.
En términos trimestrales, la cuenta corriente registró
un superávit de USD 1 634 millones en el cuarto trimestre de 2023, equivalente
a 2,3 por ciento del PBI, en contraste con el déficit de USD 1 236
millones del mismo trimestre de 2022. Este resultado respondió principalmente
al incremento del superávit comercial, por la recuperación de los términos de
intercambio, la menor demanda de insumos industriales y la demanda más elevada
por parte del exterior de metales y gas natural.
No hay comentarios:
Publicar un comentario